miércoles, 28 de marzo de 2007

Carta desde el Manicomio:

Manicomio de la Castañeda. Día 24 del mes tercero del año de nuestro señor Jesucristo de 2006

Escribo desde este rincón oscuro olvidado de la conciencia humana. Escribo este mensaje en una botella para que llegue hasta sus oídos a través de la voz de alguien más...

Hace un rato que las autoridades católicas y las pro católicas del gobierno han luchado encarnizadamente por prohibir el aborto en este país bajo cualquier circunstancia. Sus argumentos están basados en el supuesto de que los embriones o fetos son seres inocentes e indefensos y como lo dicen en sus carteles publicitarios: Ellos también quieren la vida. Venden la idea de que las mujeres embarazadas supuestamente tienen muchas opciones como: Tener al “bebé” y darlo en adopción, “unirse en el sagrado sacramento del matrimonio” y muchas otras tonteras por el estilo. Lo que por su puesto dejan pasar por alto es algunos pequeños hechos que me he dado a la tarea de reflexionar y que presento a continuación.

1.- El suponer que las mujeres embarazadas que no deseen o no quieren tener al “producto” pueden tenerlo y después darlo en adopción es tan falaz como decir que todo indigente puede ir a un DIF para que le encuentren casa y trabajo. ¿Por qué? Porque en México no existe la infraestructura necesaria para tal cosa. Es un hecho que si todas las mujeres embarazadas que no desean continuar 9 meses o que económicamente les resulta imposible hacerlo buscaran un centro cristiano o en pro de la vida cuando seguramente estos en menos de 3 días se verían superados hasta por 100 o 200 veces su capacidad de apoyo. Y a las demás qué ¿les darían una ficha para que esperen su turno....? ya me imagino el cinismo de estos cabrones: “le llamamos dentro de unos 6 a 8 meses ahora que si tiene un parto prematuro pues llámenos a ver si le podemos hacer “canchita a su chamaco”

En la contraparte esta la estigmatización de esas mujeres por parte de los mismos mochos que no apoyan el aborto. Esos que señalan a las mujeres embarazadas fuera del sagrado matrimonio. Al llamar bastardo o mal nacido al hijo de una mujer fuera del matrimonio es la mayor incoherencia que tienen los que no lo apoyan. Ó sea es una onda de no aborten por que es un pecado matar pero también es un pecado andarle poniendo fuera del matrimonio y aún mas, tener un hijo en esas condiciones. Así que no se dejen engañar, son pecadoras de cualquier manera. Si superamos este dilemucho moral ya nada más sobraría que las mujeres embarazadas sin desearlo decidieran que tipo de “pecado" quieren cometer porque ante los ojos del Dios poderoso de la iglesia todo lo que hagan a partir de este momento estará mal. No importa lo que crean que es mejor para ustedes.

2.- Por otra parte superando el análisis de infraestructura y economía esta el hecho de que no todas las mujeres que abortan son abusadas sexualmente por algún violador. La mayoría son adolescentes de clase media y alta que argumentan que sus vidas se arruinarían si tuvieran un hijo o que aun no están listas... Bueno, también desde este lado sus argumentos no les ayudan mucho ¿verdad? Pero a ver díganme algo: imaginemos que una de estas chavitas que piensan según lo acabo de plantear decide tener al bebé por pura presión moral o social. La iglesia y ciertos sectores de la “suciedad” dicen que los fetos o embriones también desean la vida, pero imaginen que tipo de vida le puede dar una mujer a un chavito si lo considera como el responsable de arruinar su vida...

Si dicen que los fetos o embriones desean la vida (lo cual a mi en lo personal me parece una reverenda mamada moralina) partiremos desde el hecho de que estos pueden ver el futuro o algo así. ¿Entonces serán pendejos los fetos? Digo, como que nacer para sufrir violencia psicológica y emocional x parte de sus padres no me parece como muy hábil.... si, que buen pedo que no abortaron pero ¿que es mas criminal? Eliminar una vida en potencia o potenciar la muerte de manera lenta y cruel de alguien humillándolo, tratándolo mal, golpeándolo, etc. Por que aquellos que digan que las mujeres ya teniendo a sus hijos piensan diferente es la verdad un argumento muy distorsionado. Es una visión muy de películas buen pedo holigudenses.

3-El hablar de “tener” y “deber” viola el libre albedrío de las mujeres embarazadas. La responsabilidad de los actos propios es de cada persona no de los otros. Así que para el colegio de abogados cristianos y demás personas que intentan defender a los inocentes y desprotegidos embriones y fetos de ser abortados sépanse que van a sacar a un condenado de la cámara de gas para meterlo a la tortura china de la gota de agua. ¿Por qué? Por que una vida no nace cuando un esperma y un óvulo se fecundan sino cuando dos esencias se desprenden en lo particular y forman un tercera que es parte de los dos pero que no les pertenece. Es decir, cuando dos personas piensan en crear vida. Una pareja puede desear un hijo y darle vida muchos años antes de que tenga vida materialmente y lo mismo una mujer que al desembarazarse sola crea una segunda esencia de si misma para crear esa vida. Pero lo que sí no podemos suponer es que la materia en sí es vida. Al menos no vida humana como la comprendemos... pero de eso, de eso les hablare después porque ya llego la hora de mi valium; hasta luego y cuídense. Ahh si, y no olviden que estas son las opiniones de un loco, no necesariamente representan las opiniones de Requiem Labs ni de Factor Radio o de quien publique esta carta.

Arre lulu.

Atte.

Lorenzo de la Tatema Quemado, alias Choko.


Enviada por: Choko, del blog Irás y no Volverás